martes, 25 de junio de 2013

Cargamento y ciencia


Interior de la ATV-4
La llegada de la ATV-4 ha cambiado el ritmo de vida al que me había acostumbrado, porque el traslado de cargamento es ahora una de nuestras actividades de mayor prioridad, especialmente para ciertos “payloads” (se llaman “payloads” porque son cargamentos pagados, en contraposición al cargamento logístico). Así que desde el momento que la escotilla se abrió, comencé a trabajar trasladando una bomba para el sistema de refrigeración del módulo Columbus que instalaré tan pronto como pueda. Desde entonces, como loadmaster (especialista de carga), he intentado seguir los movimientos del cargamento, los cuales son coordinados y coreografiados en la Tierra – incluso los realizados por mis compañeros. 

Todo tiene que ser extraído de la ATV en un orden concreto. Es catalogado y después instalado en su ubicación definitiva dentro de la ISS. Al mismo tiempo, tenemos que transportar todo el material de desecho desde la estación a la nave – todo sin cambiar el CG (centro de aplicación de fuerza) demasiado.

Chris Cassidy ayudando a descargar
No nos pasamos todo el día trasladando el cargamento (aunque nos encantaría terminar la tarea tan pronto como fuera posible) porque el trabajo “real” a bordo debe continuar. De hecho, durante esta última semana hemos seguido llevando a cabo experimentos ya presentes a bordo y también hemos instalado algunos nuevos. Uno de los experimentos más importantes que estamos realizando ahora mismo se llama “ecografía espinal”. Estudia los cambios en la estructura de la columna que causa la ingravidez. Esto implica tener a un astronauta – en este caso, yo -  utilizando un aparato de ultrasonido para obtener imágenes de la columna de otro astronauta (en este caso, Karen) guiado por radio por un operador en tierra. Las imágenes que tomamos después son evaluadas y estudiadas en tierra, y comparadas con imágenes tomadas antes del vuelo. Este estudio es importante e innovador por muchos motivos: para los astronautas, los cambios en la estructura de nuestro cuerpo podría tener consecuencias catastróficas de vuelta en la Tierra. Si conseguimos entender qué cambios son estos, seremos capaces de combatir mejor los efectos negativos, o mejor aún, de prevenirlos. Pero las implicaciones terrestres son incluso más importantes: hasta ahora, hemos necesitado aparatos de resonancia o rayos X caros y voluminosos para realizar cualquier diagnóstico de la columna. Estos estudios significan que ahora será posible obtener resultados similares utilizando un aparato de ultrasonido del tamaño de un ordenador portátil, y a un coste mucho más bajo. Esta tecnología, junto a otros estudios sobre operaciones controladas remotamente, permitirá que los médicos puedan realizar diagnósticos en lugares inaccesibles o en zonas muy empobrecidas donde la gente no tiene acceso a las herramientas actuales de diagnóstico.

También estoy trabajando en un experimento llamado Pro-K. Se trata de una dieta completamente controlada desde la Tierra que se centra en la relación entre la proteína animal (PRO) y el potasio (K). El estudio pretende demostrar que esta dieta especial puede ayudar a reducir la pérdida de calcio de los huesos, lo que es uno de los efectos secundarios de la ingravidez. De nuevo, aunque los resultados de esta investigación son importantes para los astronautas, también tienen utilidad en la Tierra: millones de personas que sufren de osteoporosis se podrían beneficiar de sus resultados.

Instalando el experimento FASES
He estado directamente implicado en otro experimento que vino a bordo de la ATV-4. Se llama FASES y examina la estabilidad de emulsiones. Este es un experimento exclusivamente europeo – lo cual es genial. Conlleva estudiar las diferentes fases de distintas emulsiones, algunas más estables, otras menos. Las emulsiones están presentes en todas partes todos los días, desde la química industrial (por ejemplo petróleo crudo y otros combustibles) hasta la cocina (la mayonesa y vinagreta son emulsiones). Necesitamos entender las características de las emulsiones porque a veces es útil incrementar su estabilidad (al almacenar comida o combustible) o reducirla (al extraer combustible).

Preparar este experimento es realmente complicado y aunque había practicado en tierra, hacerlo en órbita fue completamente diferente. Una vez más, los problemas que me encontré eran los contrarios a los que tuve durante la formación. El “rack” (el laboratorio) donde instalo el experimento es muy delicado y complejo, y tuve que usar un montón de herramientas distintas. Justo en mitad de la instalación, el sistema de almacenamiento que estaba utilizando (una bolsa de plástico con cierre hermético) se abrió y mandó un montón de herramientas volando en una nube de metal – ¡la mitad del Columbus se convirtió en una especie de proyecto pesadilla de Ikea!

La próxima semana comenzará con la actividad extra-vehicular (EVA) de mis compañeros rusos, y participaré en el cierre de la escotilla y la comprobación del airlock. Después habrá más experimentos, y también comenzaré la preparación para mi EVA.

lunes, 17 de junio de 2013

ATV Albert Einstein, ¡bienvenida a bordo!


¡Bienvenida a bordo Albert Einstein! Una vez más, la nave espacial de la ESA, el buque insignia de la flota de cargamento de la Estación Espacial Internacional, se ha comportado perfectamente, llegando a la estación sin ningún problema.


ATV-4 Albert Einstein
Nuestros ingenieros europeos, trabajando durante años en el proyecto de la ATV (siglas en inglés de Vehículo de Transferencia Automatizado) han conseguido hacer que algo extremadamente complejo parezca fácil: una nave que lleva más de 7 toneladas de material, gas, agua y experimentos, es puesta en órbita, viaja millones de kilómetros y después se acopla de manera autónoma ¡con una precisión de 1 centímetro!

Durante las últimas horas de la aproximación y acople de la ATV, yo he sido el responsable de monitorear todos los sistemas de a bordo junto con mi compañero cosmonauta Alexander “Sasha” Misurkin. Para aprender más sobre por qué esta tarea es necesaria y sobre las dificultades que pueden presentarse, lee mi antiguo post en Shenanigans09 blog.

La ATV-4 ahora está aparcada en la parte trasera de la Estación Espacial Internacional donde se llevo a cabo el acople. Es perfectamente estable y recibe de la Estación la energía necesaria para mantener el funcionamiento de sus instrumentos. Dentro de ella, todas las luces siguen apagadas.

El domingo por la mañana, Sasha y yo abriremos por primera vez la compuerta que la conecta a la Estación y comenzará una larga configuración. Seré el primero en entrar en la ATV-4, inicialmente con gafas de seguridad y mascarilla, para evitar la posibilidad de entrar en contacto con polvo u otros agentes que puedan ser peligrosos. Yo encenderé las luces por primera vez y después, con ayuda de Alexander, instalaré un sistema de purificación de atmósfera. Una vez que hayamos eliminado toda duda de posible contaminación por polvo u otras sustancias peligrosas, comenzaremos a mover el cargamento de la ATV-4 a la Estación. Todos los miembros de la tripulación participarán en este proceso pero yo estaré a cargo de las operaciones (el llamado Loadmaster). Puede parecer una tarea simple pero requiere de una coreografía precisa que debe ser seguida a la perfección porque en caso de emergencia, la ATV-4 debe ser capaz de desacoplarse en cualquier momento. Si eso ocurriera, necesitaríamos saber donde está cada cosa. Además, la descarga debe hacerse de modo que el centro de gravedad permanezca estable para que los cálculos realizados por especialistas se mantengan correctos.

Comida de astronautas
Otra razón por la que las operaciones de descarga son complicadas es por la ingravidez. Aunque transportar grandes objetos no requiere de tanto esfuerzo como en la Tierra, instalarlos puede presentar dificultades inesperadas. Es muy fácil perder la noción de lo que se ha movido y dónde ha sido colocado ya que nada permanece en su lugar si no es atado. Todos los contenedores son muy parecidos y sólo se les puede distinguir por un código, por lo que es fácil confundirlos. Por último, es verdad que en la Estación Espacial Internacional estamos en ingravidez pero como expliqué en otra entrada anterior, nuestra masa está siempre con nosotros y cuando añadimos la masa de otros objetos, a veces algunos muy grandes, nuestros problemas se acentúan (no me atrevo a imaginar qué pasaría si perdiera el control…).

Mis compañeros y yo estamos comprometidos a hacerlo lo mejor posible y tenemos ganas de comenzar el trabajo: a parte de los experimentos, oxígeno y agua, la ATV-4 también nos trae ropa personal y comida, entre las cuales por supuesto el arte culinario de la cocina italiana será como la guinda del pastel. ¡No hay nada como la promesa de una cena italiana que ofreceré de mis propias provisiones para incitar a mis compañeros a trabajar rápido y bien!